La fiesta de San Fermín se celebra cada año del 6 al 14 de julio en Pamplona, Navarra, y culmina con la conmemoración de su martirio el 7 de julio. Conocida mundialmente por el encierro de los toros, la festividad combina momentos de profunda devoción, como la procesión en honor al obispo mártir, con el bullicio de peñas, música y fuegos artificiales. En este artículo descubrirás el origen de San Fermín, la historia de su traslado desde Amiens, los actos religiosos clave, las costumbres populares, anécdotas y consejos para vivir la fiesta de forma segura y respetuosa.
¿Quién fue San Fermín? Biografía y martirio
San Fermín, apóstol de Navarra, nació en Pamplona hacia el año 272 y fue enviado a educarse en Amiens (Francia), donde fue ordenado obispo por san Marcial. Al regresar, predicó el Evangelio con tanto celo que el gobernador romano de Pamplona lo persiguió y condenó al martirio. La tradición sitúa su decapitación el 7 de julio de 303, convirtiéndolo en primer mártir cristiano de la región y patrón de la diócesis.
El traslado de sus reliquias: de Amiens a Pamplona
En el siglo XII, los monjes de San Cipriano de Berdún trajeron las reliquias de San Fermín desde Amiens hasta Pamplona. Su llegada, llena de peripecias y prodigios, se recuerda cada 5 de julio con la “Bajada de San Fermín”: un desfile hasta la catedral para depositar sus restos en la cripta. Este acto inaugura oficialmente las fiestas patronales y marca el inicio de la novena en su honor.
La procesión de San Fermín: fe y tradición
El 7 de julio tiene lugar la solemne procesión de San Fermín. Portada en andas, su imagen recorre las principales calles del Casco Antiguo, acompañada de miles de fieles, sacerdotes y autoridades. Antes de salir, en la catedral se celebra una misa pontifical en la que el obispo recuerda la entrega del patrón y anima a los pamploneses a vivir la fiesta con respeto y devoción.
El chupinazo: el estallido de la fiesta
A las 12:00 del 6 de julio se lanza el famoso chupinazo desde el balcón del Ayuntamiento. Un cohete marca el comienzo de los encierros y de nueve días de fiesta continua. Decenas de miles de personas, entre pamploneses y visitantes, se congregan en la plaza Consistorial para gritar “¡Pamploneses, Viva San Fermín!”, iniciando el rito que da paso a las peñas, la música y la alegría desbordante.
Encierros: adrenalina en las calles
Los encierros de San Fermín, celebrados a las 8:00 de la mañana del 7 al 14 de julio, son el acto más famoso internacionalmente. Encabezados por seis toros bravos y una manada de cabestros, recorren 875 metros por calles estrechas hasta llegar a la plaza de toros. Correr delante de los toros exige valentía, técnica y un gran sentido de la responsabilidad; por eso, cada año se recuerda la importancia de la seguridad y el respeto al reglamento.
Corridas y actividades taurinas
Tras los encierros, cada día a las 18:30 se celebran las corridas de toros en la plaza Monumental de Pamplona. Reconocidos diestros de renombre internacional participan en faenas donde tradición y arte se funden. Junto a ellas, las recortadores muestran su destreza para esquivar al toro sin muleta ni capote, manteniendo vivo el patrimonio cultural navarro.
Música, danzas y peñas
Desde la aurora hasta altas horas de la madrugada, las calles de Pamplona vibran con el sonido de txistus, tambores y gaitas. Las peñas —agrupaciones festivas con nombres pintorescos— son el alma de la fiesta: organizan actos solidarios, encierros infantiles y sartenes populares donde reparten potajes y sangrías. El Pobre de Mí, cántico final el 14 de julio, cierra la fiesta con melancolía y esperanza de volver el próximo año.
Gastronomía navarra en San Fermín
La fiesta se paladea con pintxos de chistorra, queso de Roncal y vino de la Tierra Estella. En las peñas y bares, los visitantes disfrutan de calderetes, migas y pochas, acompañados por chistorra a la sidra. El helado de turrón y el pastel vasco endulzan las sobremesas, mientras se brinda con macerados caseros al ritmo de los txikis y gigantes desfilando por la ciudad.
Consejos para vivir San Fermín con seguridad
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Planifica tu encierro. Conoce el recorrido y las normas; no te subas a los vallados.
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Protege tu salud. Hidrátate con frecuencia y evita el sol del mediodía.
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Respeta las tradiciones. Participa con actitud responsable y cortesía hacia los pamploneses.
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Movilidad. Usa transporte público o apartamentos céntricos: las calles se cierran al tráfico.
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Emergencias. Localiza los puntos de atención sanitaria y sigue las indicaciones de la Policía Municipal.
Oración a San Fermín
“Oh glorioso San Fermín,
valiente pastor de Navarra,
protector de Pamplona y guía de su pueblo,
intercede por nosotros ante el Señor.
Danos fortaleza para afrontar nuestros miedos,
humildad para compartir con los desfavorecidos
y alegría para celebrar tu fiesta con respeto y devoción.
Que tu ejemplo nos inspire a vivir cada día con fe y entrega.
Amén.”
Curiosidades y legado de San Fermín
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El célebre encierro se popularizó en el siglo XX gracias al escritor Ernest Hemingway, que plasmó su experiencia en The Sun Also Rises.
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Pamplona recibe cada julio a más de un millón de visitantes, convirtiendo a San Fermín en una de las festividades más multitudinarias de Europa.
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El sonido de la txupinera, responsable del chupinazo, es un rito de futuro: el cargo se elige cada año por sorteo.
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La catedral de Santa María y el palacio de Navarra se iluminan con proyecciones multimedia durante las noches de fiesta.